Le recuerdo con un cigarro en los labios conversando y conversando, mientras pegaba la pata de una silla y hacia esfuerzos para que el trabajo quedara bien. Jubilado quizás cerca de los 60 años , era el segundo periodo que estaba con el. Yo mujer con mis niños pequeños, me gustaba visitarlo en su Taller, porque sus largas charlas eran una delicia y a mi no me gustaba perderlas.
Agustín Aedo, lo conocí hace muchos años, cuando era una chiquilla de 14 años y andaba con una de sus hijas Marta de la mano para todos lados. Marta era mi amiga inseparable, y yo por ende con un solo hermano y mi abuela, buscaba familia acogedora, ellos me recibían en su casa sin chistar, era yo un miembro mas, en esa época de la adolescencia, tenia muchos sueños y uno de ellos era tener una gran familia como la de Marta. Don Agustín había pertenecido a la fila de las FFAA y estaba jubilado, entretenido, paciente, amoroso, con una mujer que lo adoraba y con 9 hijos que hacían un tremendo alboroto en una casa tan pequeña. Para mi esa casa de la Población Manso de Velasco tenia un tremendo encanto, casi de 3 pisos, asi como lo hacían los chilenos de mi época y aun hoy en día, vamos colocando añadidos para mas dormitorios y mas camas. A quien le importaba si era fea o bonita, era cálida, tenia olor a cariño y para mi, esa familia era parte de mi vida!!
Don Agustín refunfuñaba y lógico la casa tan llena, no le dejaba espacio, así que temprano tomaba su café y partía a la otra casa en el Barrio Norte, donde tenia todos sus cachureos, muebles sin patas, desarmados, que el minuciosamente se colocaba a la tarea de armarlos y darles vida y en esos ratos de intenso trabajo y soledad, le acompañaban los infaltables puchos, que se comía una tras otro, pero sin hacer nada!. Los iba dejando en sus labios hasta que quedaban convertidos en cenizas. Y en la época en que fui adulta y con hijos solía visitarle. Ya los hijos, varios de ellos no estaban, habían partido en busca de sus destinos, a otras ciudades y también al extranjero. Aun quedaba mi amiga Marta a quien visite para contarle mis cuitas y alegrías, para solicitar su apoyo cuando las cosas se me colocaron carne de gallina.
Deje de verle por muchos tiempo, cuando me aleje de Talca y llegue a este norte Tocopillano, pero hace unos años atrás, dos o tres pase a verle, en uno de mis viajes, quería estar con mi amiga y de paso con ellos, que para placer mio, aun estaban con vida, recuerdo que nos tomamos fotos y almorzamos y en esa oportunidad mirándome a los ojos mientras compartíamos la mesa me pregunto directamente, así como el era, directo, sin tapujos:
- y cuénteme que la trajo por aquí?
yo le respondí
-quería verlos!, tantos años alejada y mantengo muy buenos recuerdos de usted y familia, ustedes fueron mi apoyo y me apapacharon generosamente,como una hija mas!!..y eso..eso no se olvida jamas!...así que como estaba cerca, pase a verles y ademas iré al cementerio para dejar unas flores a mi madre y hermano..
- me respondió muy emocionado- se lo agradezco, usted, se paso !!, recordarnos!!, y venir a vernos de tan lejos!!
Se le notaba!!! sus ojos lo decían todo, estaba muy feliz ..... y yoooo , sentía en mi corazón ese cariño eterno.
Cuando partí, me despidieron contritos, su esposa fue a la puerta y la vi pequeña con sus ojitos tristes, era posible que fuera la ultima vez...
Cuando partí, me despidieron contritos, su esposa fue a la puerta y la vi pequeña con sus ojitos tristes, era posible que fuera la ultima vez...
Anoche supe que partió a la edad de 95 años!!, buen viaje querido Don Agustín Aedo, lo tengo en mi retina y en mi corazón. Fuiste un gran hombre, esposo y padre de 9 hijos. Y ademas padre de todos nosotros que entrabamos a tu casa. He visto las fotos de la familia Aedo Lara, van como por los ochenta, una tremenda prole!!, has hecho caso al mandato divino "ve y multiplica la tierra!! ..
Desde aquí, tan lejos, en el norte de Chile te envío un gran abrazo para ti y familia y te deseo un viaje placentero y desde luego, espéranos, pues todos llegaremos a tu nueva casa..!
Con cariño para los Aedo Lara
Que buena forma de recordar a una gran persona!!
Que buena forma de recordar a una gran persona!!
Recuerdo con emoción enorme, a Don Agustín Aedo, siempre dispuesto a brindar un apoyo en días duros.
Gracias estimada América por tu recuerdo.
Saludos
Manuel Muñoz Aravena